Una vez en el hotel bajaron del coche y se fueron a comer.
- Que cansancio tanto coche. –Dijo Aza.
- Que blanda eres, yo he ido todo el camino conduciendo y no me quejo. –Le respondió Dani.
- Porque estas acostumbrado, yo no.
Cuando acabaron de comer las chicas fueron a descansar a su habitación y los chicos a la suya, antes de subir, se dieron cuenta de que el ascensor se había estropeado y tenían la habitación del último piso.
- Con lo que me duelen las piernas… -Se quejaba Maria.
- Va, yo te animo. –Le contestó David riéndose.
Aza muy decidida se soltó de la mano de Álvaro y se plantó delante de Dani.
- Como tú no estás cansado ahora me subes en brazos.
Dani la cogió a “caballito” y en ese momento tanto Judit como Álvaro se los miraron con una cara bastante rara y empezaron a subir cabizbajos.
Una vez arriba, Aza se bajó y le dio un beso en la mejilla a Dani, Álvaro se fue directamente para la habitación sin despedirse, al igual que Judit.
Cuando las chicas llegaron a la habitación decidieron irse de compras, menos Aza, que prefería quedarse a dormir. Por otro lado, los chicos se iban a la playa, pero a último momento, Dani dijo que no porque tenía que hacer una llamada algo importante.
Cuando todos se fueron, Aza salió de la habitación para encontrarse con Dani donde habían quedado.
- ¿Dónde
vamos? –Preguntó Aza.
- ¿Quieres
que vayamos a mi habitación? Así nadie nos ve. –Contestó Dani. Aza aceptó
encantada y se dirigieron hacia la habitación.
Mientras tanto, las chicas iban de tienda en tienda.
- ¿Te
pasa algo Judit? –Preguntó Sonia. –Es que estás muy callada.
- No,
tranquila no me pasa nada. –Contestó ella.
- Yo
se que te pasa, lo de Aza ¿verdad? –Preguntó Ayla.
- No,
en serio, no es nada. Son solo amigos, ¿por qué tendría que estar celosa?
–Respondió ella.
- Pues
a Álvaro no le ha sentado muy bien… -Añadió Maria. –Vamos ya para el hotel que
me duelen los pies.
En la recepción del hotel, los dos grupos se encontraron, pero Álvaro y Judit empezaron a sospechar.
- ¿Dónde está Aza? –Preguntó Álvaro.
- Se ha quedado arriba durmiendo, no ha querido venir. –Le dijo Ayla.
- ¿Y dónde está Dani? –Preguntó Judit.
- Se ha quedado en la habitación porque tenía que hacer una llamada. –Le dijo Carlos.
En ese momento Álvaro y Judit se quedaron mirando.
- Voy a subir, me da igual que no estén juntos pero tengo que subir. –Dijo Álvaro.
- Yo te acompaño. –Le contestó Judit.
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